Desobediencia grave a las autoridades

No cualquier desobediencia será delito, es más, únicamente las graves deberán ser investigadas por los Juzgados de Instrucción, de lo contrario serán procedimientos administrativos. Estos son los requisitos del delito:

• Dictado de una orden directa y expresa a un particular.
• Conocimiento de la orden por el sujeto.
• Existencia de un requerimiento por parte de la autoridad con apercibimiento de incurrir en delito de desobediencia en caso de incumplimiento.
• Negativa u oposición a la misma.
• Especial gravedad de la desobediencia.

• Incumplimiento de resoluciones judiciales firmes.
• Incumplimiento del requerimiento para custodiar un bien.
• Publicación de un vídeo, imágenes o fotos en las redes sociales o en un diario pese al requerimiento judicial de no hacerlo.

Se castiga la desobediencia grave a la autoridad o a sus agentes en el ejercicio de sus funciones con la pena de prisión de 3 meses a 1 año o multa de 6 a 18 meses.

Dado que la diferenciación entre un delito y otro puede ser difusa, vamos a ver algunos ejemplos:

• Cuando un vehículo es inmovilizado por la policía y se da aviso a la grúa para que lo lleve al depósito municipal, existirá resistencia si el conductor se opone activamente a que el agente bloquee su paso hasta el coche o a que la grúa pueda realizar su labor. Será desobediencia cuando la persona desatienda el mandato de retirar el coche.
• Cuando existe una manifestación no autorizada y un manifestante se resiste activamente a ser desalojado de la vía pública nos encontraremos ante resistencia. Cuando sin embargo, haya una resolución que impida la manifestación por motivos de interés público y el manifestante contravenga esa decisión, nos encontraríamos ante desobediencia.

Si la policía requiere verbalmente a un ciudadano para conminarle a hacer o no hacer y éste sale huyendo, el mero hecho de huir no supone la comisión de ningún delito. No se puede exigir a un ciudadano que atienda un requerimiento para ser detenido, sino solamente que no responda agresivamente ante esta solicitud.

Igualmente, si la policía te requiere para colaborar en una investigación en curso y decides libremente no tomar parte por los motivos que sean, esta negativa tampoco es delito. La falta de colaboración nunca puede constituir otro delito.

Se trata del supuesto más leve, castiga con penas de uno a tres meses de multa a aquellos que falten el respeto a una autoridad o no muestren la consideración debida.

La consideración debida es una expresión difusa que podría englobar cualquier elevación de tono, reproche o comentario inoportuno, por lo que los tribunales deben ser restrictivos a la hora de interpretar esa falta de respeto o consideración.